Sumando fuerzas, Switching y Firewalling para proteger maquinaria e instalaciones industriales

Dentro de cualquier estrategia de protección de entornos industriales no podemos pasar por alto la heterogeneidad de éstos. No podemos considerar de igual manera una actividad dedicada a la fabricación de vehículos, farmacéutica, alimentación o componentes electrónicos. Los tiempos de respuesta, los máximos asumibles de parada, estrategia de producción, pueden no ser para nada similares. Por tanto, la manera en la que debemos priorizar y desplegar las medidas que prevengan incidentes, debe ser distinta.

Pero independientemente del sector, los propietarios de los activos (esto es, las propias empresas) incorporan tecnología distinta de fabricantes, ingenierías, integradores o cualquier otra tercera parte debido al alto grado de especialización aparte de la complejidad o necesidades concretas de estos entornos. Claro está, que en muchos casos sea más operativo, económico o práctico externalizar estas tareas en lugar de desarrollar la solución y el conocimiento con medios internos.

Puesto que forman parte del proceso, se ha de acordar contratos de mantenimiento con el fin de garantizar un recurso en caso de ser necesario y recibir soporte a lo largo del ciclo de vida del producto, que como sabemos, dentro del mundo es OT es mayor que el tradicional IT. Esto es, respuesta ante una incidencia, actualizaciones, modificaciones o cualquier otra razón, de tal manera que el propietario de ese activo no pueda ver afectada su actividad por no saber resolver, atender o actuar sobre él.

Esto supone un problema para los citados integradores ya que una vez sus sistemas o maquinaria están en las instalaciones de sus clientes, dejan de tener, a priori, un control sobre el mismo. No tienen la garantía de que alguien pueda, en un momento dado, “conectarse” y llevar a cabo una acción que derive en un mal funcionamiento y generar un incidente con mayor o menor impacto. Por tanto, resulta necesario controlar los puntos de conexión a ese equipamiento en particular al de red como switches que permitan la comunicación entre equipos y componentes. Particularmente si hay consecuencias económicas…

En este sentido la conjunción de Switches y Firewalls del fabricante Fortinet pueden ayudarnos ya que dichos cortafuegos poseen la capacidad de controlar algunas funciones de los switches mediante un controlador embebido.

En este caso disponemos de un Fortigate Rugged 90D y un FortiSwitch Rugged 112D-PoE.

El Firewall será el que nos una a la red del cliente y evitará que un activo de la red de éste llegue a los componentes de la instalación o maquinaria en cuestión. La configuración podrá ser variada según la topología, esto es, que opere a nivel de capa 2 o 3. Será pues nuestra seguridad perimetral. El modo de acceso lo podemos establecer a través de un túnel VPN a partir de las opciones que nos permite el equipo. Obviamente, habilitaremos los distintos perfiles de seguridad como Antivirus, IDS/IPS, Control de Aplicación, etc.

Ya aguas abajo del Cortafuegos, el Switch permitirá la comunicación entre los equipos finales. Cómo configuremos ambos equipos dependerá del tipo de instalación, arquitectura, tipo de tráfico, conexionado, entre otras variables.

Para poder llevar a cabo esta administración, deberemos configurar una de las interfaces del Fortigate para la comunicación con el FortiSwitch empleando el protocolo FortiLink. En nuestro caso serán enlaces por medio de dos SFP de fibra en ambos extremos. Podréis encontrar más información en estos dos enlaces, enlace 1 y enlace 2.

Por defecto el switch operará en modo “Local Management”.

Si decidimos gestionarlo desde el Firewall deberemos tener presente que la se borrará cualquier configuración existente.

Hecho esto, se nos generarán dos interfaces, dependiendo de las características habilitadas.

Para poder agregar el switch deberemos ir al apartado “WIFI & Switch Controller” y comprobar que el switch se ha detectado y autorizarlo. Una vez hecho el mismo se reiniciará. Según el modelo del switch, por defecto se definirán algunas interfaces de “Auto-discovery”. Podréis encontrar más información aquí.

En el siguiente apartado podremos crear las interfaces de cada una de las VLAN que necesitemos. En mi caso he creado la VLAN100.

A continuación, podremos asignar a cada puerto la correspondiente VLAN y configurar algunos otros parámetros adicionales relativos a PoE, STP, Status, etc.

El último apartado será lo relacionado a las Políticas de Seguridad, algo que nos es objeto por ahora, todo se andará.

Cabe mencionar que aunque veamos que las características de parametrización son menores podremos abrir un CLI desde el apartado “Managed FortiSwitch”.

No obstante, si lo deseásemos también podríamos acceder a la interfaz web. Para ello deberemos de configurar una ruta estática que apunte a la interfaz creada para el enlace Fortilink.

A partir de ahí, podremos acceder a él, no sin antes ser avisados de que este equipo está siendo gestionado por un Fortigate.

Así pues, lo que he querido mostrar hoy es la posibilidad de administrar desde un Firewall algunos parámetros de un switch y con ello ejercer un control sobre los puertos de éste desde éste sin tener la necesidad de acceder a él. Por ejemplo, ante una tarea de mantenimiento, por defecto, dejaremos deshabilitados los puertos que no se utilicen y habilitar uno en caso de ser necesario. Pero si en contreto se trata de una tarea ejercida por un personal externo a la organización como puede ser la ingeniería que construyó la citada maquinaria podríamos, crear una VLAN concreta, asignarla aun puerto del switch y que todo el tráfico pase por el firewall hacia los equipos autorizados, teniendo registro y control de lo que se realice. Aparte, someterlo a filtrado de capa 7, generando los logs pertinentes y registrando evidencias de lo que suceda.

Además, hemos de recordar que los equipos FortiGate también disponen de un controlador Wi-Fi con lo que de forma análoga podremos administrar puntos de acceso tal y como se muestra en la imagen siguiente.

Esto lo podríamos acompañar como puede ser el software FortiClient tal y como lo hablaba tiempo atrás en la entrada “Controlando a nuestros Proveedores, Parte I” y “Controlando a nuestros Proveedores, Parte II”.

Desde luego este es el aspecto más básico ya que podremos explotar algunas funcionalidades más que por ahora no hemos contemplado.

Un saludo, hasta la próxima!